
Así, comenzamos nuevos proyectos, los ideamos o simplemente pensamos en ellos con satisfacción y cierta dosis de energía. Pero enseguida aparecen pensamientos en contra de esa primera intención, que nos muestran nuestros miedos, preocupaciones, riesgos que podemos tener, etc., invalidando cualquier empuje primero y provocando, en la mayoría de las ocasiones que abandonemos el proyecto o simplemente que dejemos de pensar en él, de contemplarlo como una opción válida y eficaz.
Es decir, nos autosaboteamos, cortamos de raíz ese primer impulso creativo, de auténtico
desarrollo propio, por el propio miedo que nos genera, basado, a veces, en opiniones e ideas de otros, expectativas, creencias y, la mayoría, en nuestras propias experiencias pasadas, donde el fracaso o la frustración parecían presidir nuestro actuar y las cosas no resultaron como esperábamos. La ansiedad, el estrés, que nos generó en esos momentos aparece ahora simplemente con situarnos en ese ejemplo. Pero, si nos fijamos bien, lo anterior no es siempre cierto, es decir, en esas ocasiones anteriores, donde el resultado no fue el deseado, no fue nuestra falta de capacidad la única causante del mismo (en alguna ni siquiera estaba presente), sino que un conjunto de factores, propios y ajenos, interiores y exteriores, actuaron al unísono para generar esa experiencia determinada.


Mientras haceTapping en el punto de karate, repetir la siguiente frase 3 veces:
“Aunque sigo saboteándome a mi mismo, me acepto completa y profundamente". RONDA # 1: Recordatorio de frase negativa (Repita esta frase mientras da Tapping (toque o golpee) en la secuencia de los 8 puntos)
Sigo saboteándome a mi mismo (auto saboteándome)
RONDA # 2: Frases positivas:
(Repetir una frase para cada uno de los 8 puntos de tapping)
- Elijo aceptar que tengo éxito (o que puedo tenerlo)
- Estoy liberando mi necesidad de sabotearme a mí mismo ( de auto sabotaje)
- Me encanta sentirme libre de los viejos patrones...
- Elijo abrazar mi éxito ahora...
- Elijo aceptar cuánto éxito puedo tener......
- Estoy feliz de que he dejado mi hábito de sabotaje...
- Me encanta sentirme libre del sabotaje...
Este ejemplo general debería adaptarse a cada caso particular según las características propias y personales, pero aún así serviría en bastantes casos.